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Estocolmo, Oslo, París, las derivas del artista Daniel Acosta

En esas capitales el artista visual Daniel Acosta realizó diversas exploraciones performaticas.



Daniel Acosta, artista multimedia
“La Deriva cuestiona la actualidad; proponiendo la asamblea de gestos poéticos para cambiarla. El Proyecto Terra es el marco dentro del cual realicé numerosas acciones e intervenciones referidos a los cuatro elementos -agua, tierra, aire y fuego-, con las cuales interpelo la participación del hombre en actividades que suponen un daño a la naturaleza". sostiene el artista visual Daniel Acosta. Y enfatiza:  "La tierra no es basura".




daniel acosta fotos cultura
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Guy Debord escribió en 1958 la Teoría de la deriva. Sostuvo: “Una o varias personas que se abandonan a la deriva renuncian durante un tiempo más o menos largo a los motivos para desplazarse o actuar normales en las relaciones, trabajos y entretenimientos que les son propios, para dejarse llevar por las solicitaciones del terreno y los encuentros que a él corresponden".




daniel acosta fotos cultura
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Acosta toma ese concepto y señala que ”un árbol es un árbol, un río es un río… una sociedad, ¿qué es…? Llamo a unir la poesía de la naturaleza, con la humanidad, para no cruzar la invisible línea de lo inhumano…"
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/ Laberinto para desandar. Instalación: Daniel Acosta


Puesto 86. Mercado San Juan 3628. Inauguración Sábado 3 agosto 2013. 17 hs.


La instalación <> se interroga sobre las instituciones dominantes ligadas a la producción de alimentos y a su distribución, en el abastecimiento a la población del país. Qué tensiones han surgido y todavía surgen en los lugares donde falta el sustento. Qué conflictos históricos aún subsisten. <> es una interpelación visual sobre los responsables de la desigualdad crónica que azota y daña a nuestro territorio. Entre ellos, la Sociedad Rural Argentina, pionera en representar a los grandes propietarios del suelo. Tierra que fue apropiada en base al aniquilamiento de los pueblos originarios y repartidos y entregados a unos pocos, gracias a los favores del poder institucional de turno. Como la familia Martínez de Hoz, que dio al primer presidente de la SRA en 1866, José F. Martínez de Hoz. Esta relación permitió un desarrollo desigual y dependiente. Las tierras más ricas del país se concentraron en algunas manos. Hoy se apuesta a la soja transgénica, provocando, entre muchos problemas, desplazamientos sociales, políticos, ecológicos, geográficos, y la inmigración forzada de los habitantes del interior a la ciudad en busca de una ilusión dentro de una ficción. Una relación que se impone a través del poder y las tecnologías de los sectores dominantes, que somete a quienes se ven obligados a entrar y salir, en nuestra época neo-colonial de capitalismo global.La naturaleza tiene sus propias leyes escritas a través de millones de años, su fundamento es habernos dado las condiciones para que la vida sea posible, y lo siga siendo: tener futuro. Los elementos (tierra, agua, aire, fuego) son de todos aquellos que la cuidan creativamente. Las leyes humanas tienen que tener en cuenta que nadie es propietario del planeta: todos lo somos. La tierra es un bien colectivo, de los que vivimos en ella, en creatividad permanente.Los derechos de la tierra y de los que la moramos y veneramos impulsan la necesidad de construir otro modelo de sociedad. Otra "polis", de carácter sustentable, poética. Reflexionar sobre el Laberinto de miedo en el que estamos inmersos. Accionar con una poética de afirmación de la naturaleza. Imaginando una salida de la urbe actual, hoy, al límite de sus posibilidades. 
Artistas invitados: Carlos Alegre, Emmanuele Florance, Adalucia Sandoval Serra , Asto Van Locke, Sol Herrera, Daniel Pereyra y Silvia Calvo, Vicente Zito Lema y Santiago RuizDaniel Acosta/ mayo 13/ CABA / Boedo


    Instalación: CAMPO.  foto:  Stella Maris Francisci 
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La palabra en acción Por Viviana Ponieman                                             abril 2014

El artista Daniel Acosta presentó su libro proyecto TERRA, en el marco de su muestra en el Centro Cultural de la Cooperación.
En la exhibición “Deriva” - poética de una naturaleza caída- así como en su libro, Acosta nos lleva a recorrer sus últimos 15 años de trabajo, donde el cuerpo en el territorio funciona como el soporte  principal de su obra.
Soporte como sustento de su pensamiento y como lienzo donde plasmarlo.
Formado como pintor y grabador ha elegido el arte de acción como exploración y desarrollo de sus interrogantes en la búsqueda del sentido de las cosas.
Es así que en diálogo con los elementos - el aire el agua la tierra y el fuego- emprende ceremonias como rituales urbanos. Cabalgando entre la cosmogonía de los pueblos originarios y la performance del arte contemporáneo. Con una clara influencia de las investigaciones y ensayos de  Rodolfo Kusch, que en sus escritos como “América profunda”, analiza y compara las visiones del mundo andino con el europeo y propone una mirada desde acá.
Acosta juega con las palabras en espacios cerrados o abiertos, desarticula los significados y desarma los conceptos establecidos.
Se acuesta desnudo y se cubre de hojas amarillas. O se envuelve en las cintas de plástico que dicen -Frágil. Grita con el silencio de un mimo abrazado a un árbol, en “SOS -Terra”, o construye con hojas secas un hueco para descansar  con sus compañeros de ruta, en “SOS- nido” 

Instala un círculo de panes, en Florida y  Corrientes, rodeando la palabra Paz y portando una mochila de hambre en D.E.S.A.R.M.E, acción llevada a adelante simultáneamente en distintos países en 2003.
El artista afirma que “la tierra no es basura” mientras camina descalzo por el suelo cuarteado de Fiambalá Catamarca en la performance Oxígeno de enero de 2008
El libro es un recorrido por la trayectoria de Acosta y su proyecto TERRA,
a través del registro fotográfico de sus acciones con una poética  del  escrache, como en “Deriva” -1000 barquitos de papel  puestos a navegar el Riachuelo, fabricados con los alumnos de la escuela Nº 9 en 2005. Que tal vez preguntan por esos 1000 días prometidos para  limpiar la Cuenca Matanza - Riachuelo.


Deriva de la historia, barquitos que vuelan, planisferios transformados en naves de papel, fragilidad de este mundo que naufraga sobre un pequeño salvavidas,  SOS TERRA!
El artista interviene el espacio público como un piquete al camino de destrucción sin límites de los capitalismos. Creando así una semántica de los estragos.
Como escribe en el libro Vicente Zito Lema, compañero eventual de sus travesías. “El artista Daniel Acosta tuvo que forjar otra verdad, en el orden de las verdades en fuga... Salir de la teatralidad que acechaba al arte sin movimiento para lanzarse sin paracaídas al espacio de lo real”.

Este artista multimedia que continúa su tarea docente en el IUNA y ha llevado sus acciones por distintas latitudes, sostiene que el arte tiene posibilidades de generar vías culturales tan vitales como la naturaleza. Sembrando así una poética de la resistencia
El arte se le hizo aventura sin retorno, para quien supo de cautiverios, atado ahora  a la naturaleza, su cuerpo es palabra en la búsqueda de la libertad.  /////////////////////////////////////////
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 marzo 2011
En la muestra "Deriva" (poética de una naturaleza caída) que se exhibe en el Centro Cultural de la Cooperación, así como en su libro proyecto TERRA, el artista Daniel Acosta recorre sus últimos quince años de trabajo, a través del arte de acción donde utiliza su propio cuerpo como soporte de su obra.

Formado como pintor y grabador, ha elegido la perfomance como un camino para encontrar el sentido de las cosas. Es así que en diálogo con los elementos -el aire, el agua, la tierra y el fuego- emprende ceremonias como rituales urbanos cabalgando entre la cosmogonía de los pueblos originarios y el arte contemporáneo.

Con una clara influencia de las investigaciones y ensayos de Rodolfo Kusch, que en sus escritos analiza y compara las visiones del mundo andino con el europeo, Acosta en sus obras juega con las palabras en espacios cerrados o abiertos, desarticula los significados y desarma los conceptos establecidos.

En distintas acciones, el propio artista se acuesta desnudo y se cubre de hojas amarillas o se envuelve en cintas de plástico que dicen -Frágil- o grita con el silencio de un mimo abrazado a un árbol.

En el año 2003 instaló un círculo de panes, en Florida y Corrientes, rodeando la palabra Paz y portando una mochila en D.E.S.A.R.M.E, acción llevada a adelante simultáneamente en distintos países.

El artista afirmó que "la tierra no es basura" mientras caminaba descalzo por el suelo cuarteado de Fiambalá Catamarca en la performance "Oxígeno", en enero de 2008.

El libro es un recorrido por la trayectoria de Acosta y su proyecto TERRA, a través del registro fotográfico de sus acciones con una poética del escrache.

En "Deriva", por ejemplo, 1000 barquitos de papel fueron puestos a navegar en el Riachuelo, fabricados por los alumnos de la escuela Nº 9 en 2005. Una forma de interpelar por esos 1000 días prometidos para limpiar la Cuenca Matanza - Riachuelo.

El artista interviene el espacio público haciendo un piquete al camino de destrucción sin límites de los capitalismos, creando así una semántica de los estragos.

Como escribe en el libro Vicente Zito Lema, compañero eventual de sus travesías, "el artista Daniel Acosta tuvo que forjar otra verdad, en el orden de las verdades en fuga... Salir de la teatralidad que acechaba al arte sin movimiento para lanzarse sin paracaídas al espacio de lo real".

Este artista multimedia -que continúa su tarea docente en el IUNA y ha llevado sus acciones por distintas latitudes- sostiene que el arte tiene posibilidades de generar vías culturales tan vitales como la naturaleza sembrando, así, una poética de la resistencia.

El arte se le hizo aventura sin retorno para quien supo de cautiverios. Atado, ahora, a la naturaleza su cuerpo es palabra en la búsqueda de la libertad.









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junio 2007 

Sociedad





CULTURA : EXPONE DANIEL ACOSTA 
La memoria, vuelta esperanza 



DELANTALES. UN MENSAJE VITAL.
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Silvana Avellaneda ESPECIAL PARA CLARIN 



A -p-a-r-e-c-i-d-o-s. Impactan de entrada las letras que se  suman desde los pintorcitos que penden del gran árbol del patio del Centro Cultural "Caras y Caretas". Daniel Acosta es el autor de la intervención Aparecidos, parte de una serie que es una marca de autor: la búsqueda de la memoria, que ahora se convierte en "un mensaje vital, ya no desde la desesperanza de las pérdidas sino como parte de un árbol, como fuerza", dice el artista.

Luego emerge Deriva, la segunda puesta de Acosta que esta vez representa una Argentina de plateado furioso, un pan, una imagen y la nada. "Es una Argentina de metal, exprimida pero donde hay una polisemia de abordajes para hablar de esa especie de todo terreno que somos para superar las crisis".

Una brisa mece los pintorcitos en las ramas. El pan sigue inamovible en el corazón de la Argentina. Acosta sufrió la última dictadura (estuvo cinco años detenidos cuando era estudiante de Bellas Artes) y con estas instalaciones muestra un nuevo enfoque "que no está centrado en el Tanatos, como pudo suceder en anteriores obras mías. Apuesto a lo vital, a lo esperanzador". La muestra se pueden visitar de martes a sábados desde las 15, en Venezuela 370.

http://www.heterogenesis.com/sostierra/index.htm

Antropoceno - Pacha viva. Daniel Acosta / Umbral espacio de arte / agosto 23.

Video...Descenso tóxico…https://youtu.be/AJJGDWJ5ZF8 El oso blanco inicia el duro camino de emigrar, navega con su cría, arriba del tempano...